domingo, 16 de marzo de 2014

Eureka!

¡Eureka! en griego εὕρηκα héurēka, ‘¡lo he hallado!’; aoristo indicativo de εὑρίσκειν heurisko, ‘hallar’) es una famosa interjeccioón atribuida al matemático griego Arquímedes de Siracusa. La exclamación «eureka» es utilizada hoy en día como celebración de un descubrimiento, hallazgo o consecución de algo que se busca con afán.


La historia dice que Arquímedes pronunció esta palabra tras descubrir el volúmen de agua ascendido era igual al volúmen del cuerpo sumergido. (...) Este descubrimiento lo habría realizado mientras se encontraba sumergido en la bañera. Tal fue su alegría que salió a las calles de Siracusa desnudo y gritando ¡Eureka!.*

wikipedia


{Eureka; momento específico en el tiempo; descubrimiento;}
Eureka, el momento en que desciframos la clave de un problema o en el cual se nos ocurre una idea. Es algo tan pequeño como un segundo pero tan grande que afecta nuestro estado de ánimo, expresión y por que no, nuestro comportamiento. 
Definiendo el momento de eureka no sólo le doy inicio a mi proyecto sino que también Arquímedes y su particular manera de manifestar su emoción me habla también de lo inusual. Aunque el momento de la ducha sigue siendo uno de los mejores momentos reflexivos del día (al menos para mi), hoy en día sería improbable que alguien saliera corriendo desnudo y enjabonado por haber solucionado un problema. Sin embargo recrear un momento de "iluminación" de manera exagerada, inusual y por que no un poco ridícula (el desarrollo del proyecto lo dirá) parece el toque apropiado para agregar esa dosis de artificialidad, de crear una realidad evidentemente diferente que tanto me gustaría trabajar.